Soy un pollito
Cuando nací era un pollito con un pico amarillo estaba cubierto de plumas y una cabeza gris. Por curiosidad bajé con cuidado y comí unas flores y después fui a un río, tomé agua después para ir dormir. Pasaron días me desperté y me propuse aprender a volar subí a un árbol y después me tiré, pude volar. Decidí salir de paseo a Mérida di unas vueltas por el teleférico fue un día muy divertido.
Paul Andre.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
27 de enero del 2025.
Un Fénix
Cuando nací como un fénix era de color naranja con las alas grandes y hermosas comía muchas semillitas. Paseaba por el bosque, jugué con una nuez y con la mariquita de color rojo con paticas negras, dormí en un arbolito con un hueco y unas luciérnagas de color amarilla, me acompañaron en la noche porque eran mis amigas.
Nathalia Crespo.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
27 de enero del 2025.
Un vuelo con rescate
Un día era un pollito en un huevo después salí y vi la luz frunciendo mi ceño. Crecí hasta que me hice muy grande, comía semillas, tenía amigos, vivía bien. Pasó el tiempo hasta que aprendí a volar, pero tuve un accidente y me lastimé un ala. Unos humanos me rescataron y me llevaron a su casa, pasaron días y noches enteros, pero una mañana pude volar, di las gracias y me fui muy lejos, pude recorrer toda Venezuela.
Diland Diaz
Edad: 09 años
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
27 de enero del 2025.
Soy una pollita
Yo imaginé que era una pollita chiquita y después iba creciendo poco a poco. Luego mis padres se murieron y yo quedé sola. Para no sentirme así salí a encontrar amigos, conocí a loro que se hizo un gran y buen amigo.
Lecxmar Marcano.
Edad: 10 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
27 de enero del 2025.
Patito viajero
Cuando nací como un patito tenía las plumas de todos los colores, abrí mis alas y volé. Me fui a vivir en una laguna de patitos al lado de un gran árbol, allí tuve muchos amigos y amigas de laguna, ellos me enseñaron a nadar y a correr. Hasta que decidí salir a recorrer el mundo y visité París, Italia, Estados Unidos, Hawái y muchos, muchos lugares. Esa fue una vida de patito feliz.
Leydimar García.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
El ganso
Un día soñé que salía de un huevo, en una montaña, cuando me vi era un ganso con plumas blancas me llamaba Lean y aprendí a volar. Cuando llegué a las nubes más altas recorrí todo el pico Bolívar, también volé por toda Mérida, hice varias cosas de gansos y muchos amigos, se llamaban: Alirio, Mateo y Paul. Hicimos muchas cosas, fuimos a Europa y sobrevivimos volar sobre el Océano Atlántico.
Mathias Ortega.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Hermanitos
Había una vez una niña que estaba durmiendo, en sus sueños se convirtió en un colibrí, en todo su nido habían muchos huevitos de donde nacían muchos hermanitos, el colibrí se puso a llorar y la mamá le dijo: —Sí hijo tú tienes muchos y muchos hermanitos bebés.
Koraima Rincón
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Ernesto
Ernesto el águila un día estaba en su nido tranquilo y tuvo hambre. Fue a cazar por donde estaban los colibrís y atrapó uno, se lo llevó a su casa intentó comérselo, pero el colibrí escapó y Ernesto tuvo que irse a dormir sin comer. Pero Ernesto no era malo simplemente era carnívoro.
Adrián Bermúdez.
Edad: 09 años
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
El rescate
Yo soñé que era un ave y no cualquiera era una muy hermosa. Mi huevito se estaba rompiendo cuando me di cuenta que era un cisne hermoso al salir del huevo ya quería aprender a volar, me subí a una rama y salté, me caí, me hice mucho daño, entonces pasó una gentil mujer que se llamaba Aucaivary me levantó del suelo, me llevó a su casa, me cuidó hasta que me curé. Finalmente pude volar muy muy lejos y ella se alegró me dio leche fresca y después me ayudó a regresar al cielo para que pudiera regresar a mi hogar.
Edad: 10 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Aventuras y comida
Hace mucho tiempo de un huevito nació un pajarito, en un bosque muy bonito. Todo comenzó cuando el pequeño pajarito logró sacar una patica, luego la otra, luego el pico y por último su cabecita, así fue su nacimiento. Luego tuvo un amigo perro, uno gato, jugaban corrían, saltaban y volaban. Finalmente, se les unió un colibrí, él saltó de un árbol para seguir a sus amigos. Con el colibrí pudo volar muy alto, hasta que lograron llegar a la playa y comer pescado. Todos sus amigos lo ayudaron a llevarle pescado también a su mamá. Desde ese día salen el gato, el perro, el colibrí y el pajarito a buscar aventuras y comida juntos.
Darían Matheo.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Los amigos
Yo era un viento sopla una hoja y era la hoja caían Unido y fui Unido había un huevito que tenía colores rojos naranja y amarillo también fui el huevito de ahí salieron las patitas y después el cuerpo de un pajarito azul muy emplumado era pequeño y todo mi cuerpo era muy corto estaba aprendiendo a caminar, después me enteré que tenía alas y me caí de mi nido aprendió a volar conocí a un colibrí de cada lugar tenía un pecho verde y clarito y era muy verde así le enseñé yo a volar a mi amigo el colibrí verde y vimos unas cosas y conocimos ardillas a un loro, a un zorro y encontramos un huevito parecido del que yo había salido solo que este tenía los colores completos del arcoíris por eso mis amigos y yo lo decidimos cuidar.
Jhosmar Dugarte.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
Las loritas
Yo era una Lora y conocí a dos loritas que se llamaban Valeria y Fernanda. Las tres teníamos la espalda azul y el pico blanco y volábamos muy rápido como una bala y teníamos todas la misma edad.
Arantxa Parra.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
Familia Loros
Yo soñé hace muchos años que, en un gran árbol, entre las hojas, en un pequeño nido hecho de ramitas secas y hojas secas, había dos huevitos con manchas rojas. De repente los huevitos empezaron a abrirse, pero adentro habrían dos hermosos para pajaritos azules y blanco, eran muy bonitos, muy lindos los loritos. Ellos buscaban a su madre, se dieron cuenta que ella se había ido, los loritos empezaron a llorar, pero después se calmaron y empezaron a buscar semillas. Cuando terminaron de comer se empezaron a lanzar desde una ramita para aprender a volar. Después se fueron a encontrar a su madre en un albergue atrapada con otros pajaritos, salvaron a su madre y los tres pajaritos se fueron volando por el mundo y la gente les aplaudía por los conocían como la familia loros, los únicos pajaritos en su especie que vivieron felices para siempre.
María Díaz.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
La gran fiesta
Yo era un lorito azul nací en un nido suave, en una playa lejana. Un día visité Mérida, el teleférico, las heroínas y conocí a dos loritas Aranza y María F, con ellas me puse a jugar. También nos hicimos amigas de unas palomas todas fuimos a mi nido y tuvimos una gran fiesta.
Valery Dugarte
Edad: 09 años
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique
07 de febrero del 2025
Soy la aventura amarilla
En una montaña con un lago, en una de sus orillas había un gran árbol muy hermoso y fresco, en su copa nació una pollita amarilla de pico anaranjado que le gustaba la adrenalina. Todos los días intentaba salir a recorrer el lago, pero por sus pequeñas alas y la falta de plumas la pequeña pollita tuvo que esperar a crecer y estar lista. Cuando sus plumas se pusieron fuertes y muy amarillas pudo salir y recorrer el lugar para buscar y comer semillas y peces.
Ivana Angulo.
Edad: 09 años.
4to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
27 de enero del 2025.
Un bello país
Hoy en mi escuela soñé que era un pajarito soñé que era blanco que comía frutas que era libre y feliz comiendo mangos iba a Venezuela de vacaciones y también veía la playa. Así fue como me enamoré de ese bello país.
Mariángel
Edad: 10 años
5to grado.
Escuela Teresa Manrique
27 de enero del 2025
Rojo, negro, amarillo
Hoy en a la escuela soñé que era un pajarito, un turpial rojo, negro, amarillo, naranja y blanco. Cuando salí del cascarón aprendí a volar y volé hacia el cielo muy alto, vi animales, hice muchos amigos. También vi un puma del cual pude correr porque me intentó comer, pero al final terminó deseándome buen viaje.
Zaydimar López
Edad: 11 años
5to grado.
Escuela: Teresa Manrique
27 de enero del 2025.
Quiero volar
Todo empieza en un bosque de pinos en primavera en uno de sus árboles, que contenía un nido, donde se da la magia, un pajarito llegó a la vida. Su madre lo cuidaba, lo alimentaba hasta que llegó al primer mes. Cuando mamá pájaro le enseñó a volar, practicaban día tras día, el pajarito, desde muy temprano en la mañana antes de la salida del sol, intentando aprender nuevos trucos o limpiar la precisión de su vuelo. Su madre siempre estaba orgullosa de él, ya que algunas veces le traía su alimento favorito. Una tarde el pajarito le dijo a su mamá que quería visitar una laguna cercana, su madre acepta, con una sola condición, que volviera antes del anochecer. El pequeño pajarito aceptó y se fue volando, cuando llegó, se relajó de los ejercicios que siempre hacía en las mañanas. Hasta que una hoja cayó encima de él, pensó que no era nada, pero esta hoja se veía rara, cuando miró hacia el árbol, vió un pato sentado en la rama y se dió cuenta que estaba siendo observado y comienza aponerse nervioso, tanto que se tiró en picada a la laguna, el pato bajo del árbol y se escondió en un agujero de un tronco cercano. Así pasaron un rato hasta que el pajarito se acercó hasta el escondite del pato para preguntarle que le pasaba, ¿Por qué estaba tan nervioso? El pato le respondió en un susurro que no le pasaba nada, solamente estaba asustado porque pensaba que no le iba a caer bien. ¿Por qué? Le preguntó el pajarito, el pato le confesó que todas las aves se burlaban de él porque no sabía volar. El pajarito quedó muy sorprendido de la respuesta, porque se suponía que todas las aves sabían volar, desde el África hasta la Antártida o por lo menos eso era lo que le había dicho su mamá. Así siguieron hablando, pero el pato no dejaba el temor. El pajarito le preguntó si practicaba o si alguna vez lo había intentado. Le explicó que era un pato con suerte, que justamente se encontró con el mejor volador del lugar, que eso le aseguró su mamá, que él era perfecto para enseñarle a volar. El pato asintió y se dejó ayudar. Desde ese día se hicieron grandes amigos y después de un tiempo con mucha paciencia y practica el pato aprendió a volar y juntos pudieron partir antes del frío invierno.
Mathias Rivero
Edad: 11 años
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique
07 de febrero del 2025
Como la vida
Un día imaginé que era una hoja y estaba volando por un río muy hermoso, con el sonido del agua, pero luego la brisa se hizo fuerte y con el viento empecé a volar y volar hasta que llegué a un árbol muy alto, era un pino muy grande. Cuando aterricé en el árbol había un pequeño nido donde había un huevo. Entonces ese pequeño huevo atrapó mi alma y cuando me di cuenta, estaba dentro del huevo, me había convertido en una pollita y con todas mis fuerzas pude romper el cascarón, pude ver cómo era y el lindo color amarillo de plumas muy grandes, piernas largas, un pico pequeño pero fuerte. Luego fui creciendo con mi mamá, papá y abuela, bueno hubo un tiempo donde viví medio año con mi abuela, solas, pero viví muchas cosas buenas y malas, así como es la vida. Como es el vuelo de un ave, arriba o abajo, pero siempre aprendiendo cosas.
Danna Maldonado
Edad: 11 años
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique
07 de febrero del 2025
La escuela del rescate
Había una vez una pareja de loros que volaban de árbol en árbol, comiendo semillas. Hasta que un día la lora comió una semilla y la panza se le llenó, dentro de ella tenía un huevito. Pasaron los muchos días para encontrar un sitio bueno para que el huevito saliera de la panza de su madre, hasta que llegó el día que el huevito salió y tuvieron que aterrizar de emergencia en un árbol muy grande en Mérida – Venezuela, en el parque Sierra Nevada, hacía mucho frío, lo que era perfecto, porque la mamá lora tuvo que pujar para que saliera el huevo y ¿adivinen qué había en ese huevito? ¡si! Un huevito con un pequeño lorito. Pasaron meses antes de que el lorito naciera, sus padres se pusieron muy alegres y mamá lo nombró Lucas pasaron años y el lorito cumplía 10, nunca había salido del parque, pero un día, para su cumpleaños número 11, decidió salir de su nido y volar hasta el municipio Campo Elías, en donde encontró otros loritos, para hacerse amigo de ellos.
Viajó a la ciudad de Mérida, cerca de donde nació, pero no fue a su casa y se acercó a una escuela, pudo leer el nombre, se llamaba Teresa Manrique, se montó en un árbol, y con una rama se lastimó una patita, como pudo voló hasta el patio de la escuela donde lo consiguieron herido, lo atraparon, estaba muy asustado, no sabía lo que pasaba, lo pusieron en una jaula para cuidarlo.
Cuando se curó lo soltaron, así conoció una lora llamada Eri, se empezaron a tratar y se hicieron novios y tuvieron dos hijos llamados Erik y Luna.
Sebastián Vielma.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
La hoja con vida
Un día una hoja con vida iba por el mar y de repente llega una fuerte brisa lo que hizo que la hoja llegara a un pequeño huevo. Se colocó sobre el huevo, en donde yo vivía, cuando salió esa energía la comencé a entender. El huevito comenzó a moverse con fuerza, primero salieron mis patitas, fuertes pero pequeñas, luego salieron mis bellas alas de un color lila, luego el resto de mi cuerpo, muy esponjoso y de color blanco y verde claro, esas manchas verdes me las regaló la hoja y su magia. Ahora solo me queda aprender a volar.
Karol Molina.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
El detective de la granja
Esta es la historia de un pollito llamado Ami, que vivía en una granja con sus dos amigos Terri y Cerdi. Un día Cerdi llegó corriendo y les dijo a sus amigos que se les había perdido una zanahoria que era de oro, Ami se ofreció para ayudarlo. Así comenzó su búsqueda día y noche preguntando a otros animales. Una noche Ami salió a ver si la conseguía como de costumbre y vio a lo lejos algo brillar, fue corriendo a ver si era la zanahoria, no era lo que buscaba, había sido solo su imaginación. Al día siguiente consiguió algo que lo ayudaría, unas huellas, las siguió y logro ver la zanahoria de oro, volvió y se la dio a Cerdi quien estaba muy feliz. Ese día Ami, cambió su vida y decidió seguir ayudando a otros animales.
Eva Belisario.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
El ave que le gustaba viajar
Una vez existió un ave que le gustaba mucho volar. Durante su vida fue a muchos lugares, la playa y los ríos eran sus lugares favoritos, cuando llegaba a un lugar nuevo siempre buscaba el lugar más tranquilo, en donde se relajaba y meditaba. Así fue su vida, volar mucho, conocer el mundo y vivir relajado.
Mathias Dávila.
Edad: 12 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
El turpial
El turpial es un ave que es muy hermosa y hace un sonido bellísimo, pero este pájaro nunca se ve por acá. Vive en arboles muy altos y también pequeños, igual no sé en qué tipo de árbol o a qué altura. Total, es que es un ave que casi nunca se ve por aquí tanto como en otros lados, él hace su casa con ramas, hojas y después va a cazar su comida, pero tampoco sé que comida caza o que es lo que le gusta comer, yo creo que gusanitos del piso, los baja a buscar en la tierra para, alimentar a sus bebecitos, que siempre tienen mucha hambre de gusanitos o alguna fruta cualquiera.
Lecxandro Marcano.
Edad: 12 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Azul intenso
Había una vez dos hojitas que iban en el río, cuando de repente empieza una tormenta, las dos hojitas se separaron y volaron con el viento muy lejos una de la ora. Cada una llego hasta dos árboles y fueron a parar en unos nidos. Como por arte de magia cada huevo atrapó el alma de las hojitas, le dieron fuerza a los pajaritos en sus interiores, que empezaron a mover sus patitas muy fuertes, para poder rompió el cascaron. Ambos tenían dos patitas muy cortas, sus plumas de color azul y negro. Al pasar el tiempo cuando aprendieron a volar se fueron a la playa para poder hacer amigos. A estos dos pajaritos les encantaba escuchar las olas del mar, que era de un azul intenso igual al de sus plumas.
Ashley Valez
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique
07 de febrero del 2025.
El mundo
Yo era un pajarito con muchas plumas.
Nací del interior de un huevo, para salir lo rompí con mi pico.
La primera vez que vi hacia abajo vi mis patitas.
Mis plumas eran más o menos largas con plumas de muchos colores.
Tenía las alas muy grandes y fuertes.
Cuando aprendí a volar me fui muy lejos.
Exploré varios lugares.
Hasta recorrer el mundo entero.
Mariagny Peña.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Tito
Había una vez un pájaro que se llamaba Tito él no podía volar y los demás se burlaban de él, así que un día partió a una tierra muy lejana llamada Las tierras de Hislum, donde vivía un mago, el pajarito fue a esa tierra y cuando vio al mago dijo: Por favor gran mago dame la habilidad de volar. El mago le dijo: hola pajarito Tito, te doy la habilidad de volar, pero tienes que traerme un ingrediente especial, una flor de romero. El pajarito muy feliz aceptó y se fue a buscar la flor, cuando la consiguió, el mago hizo la pócima. El pajarito la olió, era una pócima muy olorosa, la sopló un poco para no quemarse y la bebió. Después el pájaro pudo volar y le dijo al mago: - Gracias ahora sí que puedo volar. El mago alegremente le hizo prometer que volaría con cuidado. – Ok. Respondió Tito y partió a su aldea, cuando vieron lo bien que se le daba el vuelo pudo hacer amigos y nadie más se burló de él.
Dominik Parra.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
El pajarito que voló hasta Venezuela
Era una vez un pajarito negro con amarillo que nació de un huevo, cuando aprendió a volar quiso tener una aventura y voló hasta Venezuela a un estado llamado Mérida. Llegó tan cansado que lo primero que hizo fue buscar comida, unos humanos que se encontró en una plaza muy bonita y llena de árboles le dieron alimento, pero se había llenado tanto que ya no podía volar, se tomó esa noche para descansar y hacer la digestión y al día siguiente lo volvió a intentar, partió y regresó a su casa y desde entonces lleva a sus amigos y familia a visitar esa hermosa plaza, en ese bello país.
Eduardo Rueda.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Rescate en familia
Había una vez un huevito que estaba en un nido, en la punta de un árbol, hasta que un día decidido salir y nacer. Todo comenzó cuando estiró sus patitas, sus alas, luego con su afilado pico rompió la cáscara hasta que logró ver la luz y salió. En ese momento llega la madre canaria ve al bebé tan hermoso, con sus patitas pequeñas su plumaje amarrillo, pico pequeñito y unas diminutas alas. Su madre le había traído gusanos, el bebe comió y agarró fuerzas para volar en ese momento. De repente llegó un cazador, que los vio y sin pensarlo los atrapó, los llevó a su cabaña, ahí la madre ve a otro pájaro igual a ella y se enamora. El pájaro guapo, también se enamoró de la pájara, al llegar la noche el cazador se va a dormir. El pájaro guapo era muy valiente y con su pata abre la jaula, sale para abrir la de ella. Juntos huyen volando los tres para ser felices por siempre.
Luis Pérez.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Sueño profundo
Un día que estaba muy cansado en mi escuela caí en un sueño profundo, era tan real, yo era una pequeña hoja flotando en un río cálido y relajado en la madre naturaleza, de repente comienza un viento fuerte me lleva a un grande y hermoso árbol, caí en una cosa grande formada por muchos palitos pequeños, pensé que era un nido y acerté, era un nido. Dentro había un huevo grande que soltaba una vibra extraña, todo estaba oscuro. Sentí unos brazos largos y unas patitas con garras largas empecé a patear y a abrir mis brazos.
Salí y vi la luz del sol y la naturaleza, entendí que no tenía brazos sino alas de color café con blanco, era muy grandes. Me di cuenta que era un ágila, me tiré de lo más alto, el viento me elevó al cielo y así aprendí a volar, era una sensación maravillosa. Viajaba por todas las montañas. De la nada mis ojos se cerraron y desperté. Con mi cuerpo humano, ese fue el mejor sueño de mi vida.
Valentina Lobo.
Edad: 12 años.
6to grado.
Escuela Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Volando en libertad
Había una vez un huevo de un ave pequeña muy incómoda, se sentía atrapada se quiso estirar, con el movimiento rompió su huevo, tenía plumas moradas y muy esponjosas, tenía un pico muy pequeñito. Cuando aprendió a volar pasó un día por una playa, en donde vio un atardecer muy lindo, hasta que el cielo comenzó a oscurecerse a tronar, empezó a llover, el pajarito no supo que hacer. Se escondió a esperar que pasara la fuerte lluvia, al escampar el ave siguió volando con libertad, hasta llegar a Nueva Esparta, donde conoció muchas playas y tuvo una vida muy feliz.
Mariángel Barrios.
Edad: 12 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Elo
Había una vez un pajarito que acababa de nacer, pero no estaban sus padres, lo habían abandonado porque se acercaba una tormenta y no lo querían porque no salió igual a sus padres. El pajarito pudo ver cuando ellos se alejaron volando, intentó alcanzarlos, pero no lo logró, porque estaba muy pequeño y no sabía volar. El pajarito bebé al intentar alcanzar a sus padres se cayó del árbol, cuando apareció un cuervo para comérselo, el pajarito rápidamente se escondió en una cueva para que no lo vieran, pero todo estaba muy oscuro, en el fondo pudo ver un gran bulto blanco, la curiosidad le ganó se acercó lo suficiente hasta que se dio cuenta que era un oso, blanco con negro, el pajarito se asustó y salió corriendo, pero como sus patas eran muy pequeña no pudo ir muy lejos. El oso lo agarró, se lo iba a comer, faltó poco, inesperadamente, salió un perico que lo salvó en el último momento, salieron juntos de la cueva. En el exterior los esperaba el cuervo que seguía con hambre, del susto el pequeño pajarito aprendió a volar, el hambriento cuervo los siguió por medio bosque y lograron escapar.
El pajarito le explicó que se llamaba Elo y le contó su corta historia. El perico le dijo -Pobrecito- y se despidió de él. Elo y el perico partieron por caminos diferentes.
Gabriel Rodríguez.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
El escondite
Un día estaba un huevito de pajarito en un árbol con su mamá pajarita hasta que el huevo se empezó a romper y poco a poco se fue asomando, un pequeño pajarito de color rosado con amarillo y pico puntiagudo. Cada día que el pajarito crecía era más lindo. Con el tiempo descubrió un escondite secreto que solo conocía su madre, que tenía frutas muy ricas como; arándanos, fresas y uvas. Otro día en el escondite, llegaron otros pájaros; loros y guacamayas, guiados por el olor de las frutas y se comieron todo. Cuando el pajarito volvió a su escondite, no pudo encontrar rastros de ninguna fruta, ni siquiera una pequeña fruta, voló rápido para contarle a su madre. Ella le dijo que se escondiera entre las ramas y así poder descubrir a los ladrones de frutas. Volaron juntos y encontraron un super escondite, al llegar los loros y guacamayas, su madre los asusto, luego de un rato cuando todos se calmaron habló con los otros pájaros y le pidió amablemente que, por favor, no robaran más, que si les pedían permiso con gusto ellos podían compartir.
Dariana Becerra.
Edad: 12 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Juan
Una vez un pollito llamado Juan que siempre quería volar, pero nadie le quería enseñar, un día el pollito fue a hablar con su amigo el pato Carlos, el pato más inteligente de su especie decían los demás, aunque fuera muy joven. Juan fue a decirle que le enseñara a volar, cuando llegó a su hogar, el pato lo recibió bien, pero el pollo estaba desesperado, porque le enseñaran a volar. Entonces juan le dijo al pato, que le enseñara todo sobre volar, porque él había ganado el concurso de correr, nadar y volar. El pato comenzó sus clases enseñando todo lo que sabía. Cuando estaba en el aire buscó un lugar plano para practicar. En donde el pato le explico al pollo que para poder volar necesitaba relajarse y enfocarse. El pollo no entendió al principio, después de muchos intentos lo logró y pudo volar por todo el bosque y las personas no podían creer lo que veían, porque claro los pollos no eran capaces de volar, así pollo voló para siempre.
Neomar Medina.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
La ayuda
Todo empezó en un lindo árbol, en donde vivía un huevo que ya quería nacer, se movió hasta que logró ver algo de luz, por fin era la hora de salir, le costó mucho romper todo el cascarón, por fin salió del cascarón y estaba yo, era un pequeño pájaro muy lindo, tenía un pico muy pequeño, plumas muy blancas sus patas y alas eran un poco diferentes, uno de los dedos de las patas era gigante al igual que una de sus alas. Con esas diferencias y lo pequeño que era no podía aprender a volar, hasta que vio un zorro y se lo quería comer, el pajarito tenía mucho miedo, pero la zorra se dio cuenta y le tuvo compasión, le preguntó donde estaba su mamá, el pajarito le contó que no tenía ni idea, que por favor lo ayudara a volar o a encontrar su hogar, el zorro le ayudó a cumplir su sueño, pasaron muchas horas practicando, después de muchos intentos el pajarito pudo aprender a volar. El zorro se alegró cuando lograron cumplir el sueño del pajarito. El pajarito quiso saber cuál era el sueño del zorro para ayudarlo también. Pero el le respondió que ya él lo había cumplido, porque el sueño del zorro era poder ayudar.
Sabrina Claro.
Edad: 12 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Luna y Lirio
Había una vez dos colibríes que se llamaban Luna y Lirio un día luna andaba de vacaciones en el parque Sierra Nevada, cuando iba a la cascada de la india se encontró con Lirio.
—Hola Luna tanto tiempo sin verte.
—Hola amiga, yo muy bien, ¿Qué haces por aquí
Lirio respondió alegremente:
—Vine a pasar vacaciones, voy camino a la cascada.
Luna se alegró mucho porque las dos se dirigían al mismo lugar, aprovecharon de pasear lado a lado. Al final de la tarde luna tenía que irse. Lirio tomó una pequeña flor y se la regaló a Luna como un detalle para recordar ese día.
—Gracias querida Lirio nos vemos las próximas vacaciones.
María Molina.
Edad: 11 años.
6to grado.
Escuela: Teresa Manrique.
07 de febrero del 2025.
Lucía en la montaña junto a un colibrí
Una vez en una ciudad una niña llamada Lucía fue a pasear un día con sus primas y su tío, caminaron y caminaron hasta que por fin llegaron a la cima de la montaña, a lo lejos Lucia escuchó un colibrí a los minutos vio que algo se le paró en el hombro y miró, era un colibrí de color carmelita que la acompañó hasta su casa Lucía quedó encantada y lo adoptó le daba comida y lo cuidaba.
Lucia Calina.
Edad: 09 años.
Círculo de Lectura Edgar Allan Poe.
Un paseo y unos colibrís
Una vez dos niñas se fueron de paseo a la montaña y vieron un restaurante ellas entraron, pidieron su comida, mientras esperaban se fueron al parque y se montaron en unos columpios De repente vieron a muchos colibríes sobre unas flores de diferentes colores. Ellas intentaron acercarse poco a poco, pero los colibrís se dieron cuenta y se fueron volando. Esta es la historia de un paseo y unos colibrís.
Noheidi López.
Edad: 10 años.
Círculo de Lectura Edgar Allan Poe.
El pájaro Félix y su dueño
Una vez una niña de 4 años que se llamaba Ali María pasó por una tienda de animales, vio un lindo lorito azul con verde y lo compró. Cuando llegó a su casa le dio de comer y le contó cuentos. Una de esas historias decía así
— Hoy con tantas flores los campos se alegran, mariquita suena, María García.
Cuando terminó lo metió en su jaula y lo tapó con una cobija, se acostó a dormir y el lorito empezó a cantar.
Ania Sulbarán.
Edad: 07 años.
Círculo de Lectura Edgar Allan Poe
Los pájaros y las plantas
En una selva un colibrí iba a buscar su comida, sabía que estaba en peligro, porque allí vivía un puma. Justamente ese día yo iba caminando por ahí, en mi bolso traía mi spray anti puma con eso le salvé la vida, le di comida y le construí un nido, lo subió a un árbol. Entonces se hizo de noche y tuve que acompañarlo, al día siguiente me fui a despedir de ese lindo colibrí.
Juliette Ninin.
Edad: 07años.
Círculo de Lectura Edgar Allan Poe.
Las personas, el árbol de araguaney, la orquídea y las guacamayas
Las personas siempre ven la naturaleza. Las guacamayas ya aparecían por los árboles siempre se paraban en el araguaney, desde las ramas a las guacamayas les gustaba repetir cosas. Entonces unos niños que pasaban por ahí pudieron escuchar algunas palabras raras, luego ella repitió lo que los niños decían, así estos niños se asustaron y salieron corriendo, pero se encontraron una orquídea, la arrancaron corrieron a sus casas con la orquídea y asustados.
Teiris Gómez.
Edad: 08 años.
Círculo de Lectura Edgar Allan Poe.
Los pájaros y las plantas
Un día unos pajaritos en un bosque volaban llevando su comida y se les cayó. Cuando se acercaron para recogerla escucharon un ruido de leopardo, del susto se escondieron entre unas ramas. Muy quietos casi sin respirar, así vieron que solo era un loro, él se comenzó a reír, le gustaba asustar pajaritos desprevenidos. Los otros pajaritos no sabían qué decirle, entonces el pájaro bajó recogió la comida para compartirla con el lorito y desde ese día se hicieron amigos.
Juliette Aranza.
Edad: 08años.
Círculo de Lectura Edgar Allan Poe.
El colibrí chismoso
Había una vez un colibrí que entró a la casa y se puso a vigilar, cuando el día terminó se fue a visitar unos amigos para contarles el chisme. Uno de ellos le dijo que dejara de ser tan chismoso. Al otro día el colibrí se metió en otra casa y se quedó encerrado todo el día sin comida y muy asustado, sus amigos lo rescataron y el colibrí nunca más volvió a ser un chismoso.
Juan Sulbarán.
Edad: 10 años.
Círculo de Lectura Edgar Allan Poe.